domingo, 10 de junio de 2012

La isla de Ko Pangan

La niña se puso bien, me la llevé a Ko Pangan: es una isla que está en el Golfo de Pattaya, mas arriba de Ko Samuy pero mucho más virgen que Ko Samuy. Es una isla muy montañosa y con una vegetación exuberante. En los diez días pasados en la isla tuve bastante tiempo para recorrerla porque es mas pequeña que Lanzarote, aunque la carretera es de locos. Hay sitios que un coche, como no tenga tracción en las cuatro ruedas, no sube. Asfaltaron las montañas tal cual, sin allanar nada y son como la montaña rusa, una pasada. La isla es preciosa, con unas playas limpias, de aguas cristalinas, a pesar de estar ubicadas en un golfo, que quiere decir que casi todos los ríos de Tailandia van a parar ahí, con lo que arrastran de barro, humus y sedimentos de la jungla que arrancan del suelo en la temporada de tormentas, amen del Chao Praya, el río mas caudaloso que pasa por medio de Bangkok, arrastrando toda la porquería de una ciudad de veinticinco millones de personas que desboca directamente en el delta del golfo. Por eso, en temporada de lluvias, las playas mas cercanas a Bangkok como las de Chonburi y Pattaya se ponen del color del café con leche, cosa que cambia en temporada seca. Ya tengo billete para Lanzarote, pasando por Londres para ver a mi grandullón y pasar un tiempo en Lanzarote. Llego a Lanzarote el doce de julio, así que a los amigos decirles que los veo pronto, un abrazo

viernes, 4 de mayo de 2012

Estoy en Pattaya

Estoy en Pattaya. Estando en Malasia, exactamente en Malaka en Port Disson, recibí un email diciendo que la niña mas pequeña de la tribu a la cual adoro, estaba ingresada en el hospital sin saber exactamente que tenía, así que no me lo pensé dos veces, cogí el tren en Tampin, a unos trescientos kilómetros de donde me encontraba hasta Hat Yai y allí otro tren hasta Bangkok. En el hospital el médico me dijo que al principio pensaban que podía ser paludismo, normalmente esa enfermedad trasmitida por los mosquitos está erradicada pero en momentos puntuales se destapa algún brote. Pero por fortuna la cosa se quedó en una fuerte bronquitis que después de casi dos semanas aun la tiene con antibióticos, pero mejorando. Por lo menos la fiebre es casi nula, así que toca hacer de enfermero de esta preciosidad, cosa que hago con mucho gusto La niña se llama Malik y ahora tiene ocho meses como ocho soles y unos ojos que deslumbran, bueno, una preciosidad sin mas. Subiendo por Malasia para coger el tren en Tampin a las cinco de la tarde cogí una habitación en un hotel en Harauz nada mas salir de la ducha me tumbé sobre la cama y todo empezó a moverse. Al principio pensé que era el cansancio de todo el día estar sobre la bici, entonces escuché gritos por el pasillo de gente que corría para salir a la calle y yo me dispuse a hacer lo mismo cuando me di cuenta de lo que ocurría. El terremoto fue bastante fuerte y la alerta de tsunami en la zona de costa cercana al epicentro del seísmo fue activada, aunque sin consecuencia. Parece que solo afectó al sur de Sumatra, aunque el susto no me lo quita nadie. Así que estoy como al principio y he perdido casi tres semanas. El verano se está acabando y pronto empezará la temporada de lluvias así que otro intento fallido de entrar en Borneo en la temporada seca. Intentaré cuando la niña esté bien ir a Ko Samui y mirar si encuentro algo para buscarme la vida, algún chiringuito en la playa. Ya os contaré. Un abrazo y a los colegas atletas suerte en el nuevo Ironman. Estaré informado. Besos

lunes, 2 de abril de 2012

Liado en Bangkok

Hola, he estado muy liado, ahora estoy en Bangkok, en la estación de tren. Mañana salgo para Kuala Lumpur en tren. Allí cogeré la bici hasta Malacca para coger el ferry hasta Borneo. No sé cuánto tiempo estaré en el Estrecho de Malacca puesto que no sé el tiempo que tengo que esperar para ponerme las vacunas de la malaria. De todos modos tengo quinina que empezaré a tomar cuando me lo diga el médico de fronteras en Malasia. Así que en estos momentos empiezo esta nueva aventura. Desearme suerte y que mi hada madrina siga conmigo, besos.

martes, 20 de marzo de 2012

Mi viaje a Borneo empezará el 3 de abril en tercera clase sin litera ni aire acondicionado

En este viaje tendría que haber buscado un sponsor o por lo menos haberlo intentado. La zona de Brunei es muy cara y muy grande, necesito muchos días para atravesarla y el caso que para ir a Kota Kinabalu no puedo dejar esa zona del país al margen. Aparte que este viaje se va a llevar mínimo para terminar mi itinerario no menos de dos meses, con lo que eso conlleva de gastos. Aunque también es cierto que si viajo sin ningún lujo no tendré problemas con el dinero. Lujos me refiero ir siempre a los sitios más cutres y comer en la carretera, nada de restaurantes ni hoteles, de todos modos es lo que hago casi siempre. La situación está así, ya tengo un ticket de tren para mi y la bici, me ha costado la hostia encontrarlo. Como os dije, empieza el Songran y es una fiesta que dura más de un mes porque se celebra por regiones, no al mismo tiempo, y la gente viaja a sus pueblos para celebrar la fiesta con su familia. Eso quiere decir que los trenes van a tope y no hay billetes. He conseguido uno en tercera clase sin litera ni aire acondicionado, en cierto momento pensé que podía ir hasta Malasia en la bici. De todos modos lo he hecho muchas veces pero el caso es que aparte de que esa ruta la tengo más que vista, me hubiera retrasado casi tres semanas para llegar al estrecho de Malacca para coger el ferry que me deje en borneo, con lo que lleva eso de gastos y tiempo y los monzones se me echan enzima. Pensando que para ver un poco Borneo necesito no menos de dos meses, en bici, así que después de muchas carantoñas y la promesa de cuando vuelva a Bangkok invitar a cenar a la chica que vende los billetes de tren conseguí para el día tres de abril el billete de tren por ocho euros hasta la frontera tay malasia y en bici hasta el estrecho de Malacca, pasan Kuala Lumpur sitio que por cierto he estado, si no me falla la memoria, con esta, ocho veces, pero es un buen sitio para descansar dos días antes de seguir más al sur hasta Malacca. A dos días de camino o tres a lo sumo tomándotelo con tranquilidad. Así que ya están las cartas sobre la mesa y empieza la partida en este viaje para mí a lo desconocido y viendo el mapa de la ruta a seguir en Borneo veo grandes extensiones de terreno sin pueblos visibles en el plano: eso quiere decir que pasaré unas cuantas noches al raso. Eso me da miedo pero como ya os he dicho, el miedo es el que te hace ser prudente y lo que te hace seguir vivo y estar alerta. Yo siempre he pensado que las tumbas están llenas de valientes que no tenían miedo, no sé si esto responde al que me pregunta que si no tengo miedo… Claro que tengo miedo pero es mi mejor aliado en situaciones difíciles. Bueno, no os doy mas la vara, estamos en contacto, un abrazo y desearme suerte.

miércoles, 14 de marzo de 2012

Sebastián no viene hasta septiembre...

Sebastián no viene hasta septiembre por cuestiones de trabajo, así que estoy libre de poder elegir la fecha de mi viaje a Borneo y estoy pensando que el día uno de abril es un buen momento porque es temporada seca. Si espero mucho, se me echan encima los monzones, esa es una de las causas por la que no estaré en Lanzarote para ayudar en el Ironman. Intentaré estar en Lanzarote en julio si he terminado mi aventura en Borneo y estar de vuelta para cuando llegue Sebas a Tailandia. Así, teniendo una fecha concreta, puedes preparar todo mejor, así que tengo dos semanas para prepararme físicamente y mentalmente. Este viaje a Borneo va a ser más duro que los demás porque esa isla es mucho más salvaje que los demás países asiáticos que he visitado y es por lo tanto para mi desconocida. No sé lo que me puedo encontrar pero precisamente ese es el reto y estoy listo para asumir riesgos que en otros viajes no había que preocuparse. Ya os contaré mas adelante como andan las cosas. Por ahora no voy adelantar acontecimientos. Os dejo, me voy a comer arroz. Besos.

miércoles, 7 de marzo de 2012

Por las montañas de Chan May

Cuando estábamos vagando por las montañas de Chan May mi miedo era que pasáramos la frontera birmana sin darnos cuenta. En cierto momento del trayecto al dar una curva en pleno monte vimos una barrera en mitad del camino, instintivamente miré la bandera que había colgada y vi que era tailandesa, eso me tranquilizó. Allí había dos tíos de paisano y Juanito les gritó desde la moto para saber si eran o estábamos en Tailandia. Le dije que se callara la boca porque no hay cosa que joda más a un tailandés que lo confundan con un birmano... Juanito ya debe de estar en Lanzarote, y yo esperando que llegue Sebas a pasar unos días. En el momento que Sebas se vaya, yo emprenderé mi viaje a Borneo. Lo cierto es que Pattaya no está mal, hay de todo, hay monte, montañas, lagos, ríos, mar y unos pueblos preciosos pero yo necesito volver a la carretera para sentirme libre. Aunque aquí me cuidan y me quieren necesito salir, necesito estar solo y eso aquí es imposible. mi casa siempre está llena, la hija de Chip ha tenido ayer una niña que nació con siete meses y está en la incubadora o sea que la tribu sigue creciendo. Por lo demás todo en orden, la rodillas parece que se recuperan y yo me encuentro fuerte y con ganas de emprender esta nueva aventura. Por ahora nada más que contaros, la tarjeta de fotos que le iba a dar a Juanito para que la llevara a Isa y ponerlas en el blog se me olvidó dársela, así que esperaré a Sebas para que me ayude a colgarlas. Un abrazo

martes, 21 de febrero de 2012

Con la moto en la montaña de Chan May

Juan y yo después de pasar una semana en Chan May y Chan Ray ya estamos de vuelta en Pattaya. Como siempre esa zona del planeta con esa vegetación selvática, una maravilla. Por las mañanas temprano hace frío hasta el mediodía que empieza a hacer calor.
Alquilamos una moto por ciento veinte baht, unos tres euros que pagamos a medias y nos fuimos en Chan May a la montaña. Cuando se terminó el asfalto nos metimos por un camino de tierra sin saber realmente adónde nos iba a llevar. Después de mucho rato aparecimos en una aldea de una gente muy baja y muy morenos, con cierto parecido a los Meos pero no eran Meos… me dijeron el nombre pero en estos momentos no lo recuerdo. La aldea está en medio del parque nacional y por lo que pude ver y fotografiar esa etnia no debe de ser muy grande, por las casas, bueno, por las chabolas que no eran muchas… Ahora me acuerdo, se llaman Keoos. No sé si está bien escrito, lo pongo como me sonaba. Se dedican por lo que pude ver en los alrededores a la agricultura. Había muchos árboles frutales pero lo que predomina son los cafetales.

Sin saber adónde íbamos pasamos la aldea y seguimos por el camino de tierra por medio de la jungla aunque ya se veían muchas zonas con la vegetación arrasada y quemada. Me imagino que para cultivarla.
Después de seguir por ese camino, a veces con unas bajadas que con la tierra y la pendiente con la moto era muy difícil de controlar, de hecho nos caímos una vez sin hacernos daño y la moto un pequeño roce… En las bajadas con mucha tierra Juanito se tenía que bajar de la moto así yo podía controlar un poco mas. Después de un buen rato por ese camino de tierra llegamos a una carretera de asfalto y a un lago enorme y precioso con las riberas llenas de chozas de paja y un restaurante en el que pedimos beber algo Después de muchas horas andando por las montañas con los caminos llenos de polvo la única cosa que empañaba el lugar era un destacamento militar que estaba de maniobras, tanques incluidos.
Al cabo de un buen rato por la carretera llegamos a la ciudad por el lado contrario de por donde salimos, llegamos bastante agotados por tantas horas de moto pero contentos de ver tantas maravillas, tanto de vegetación como de gente.

Mandaré con Juanito la tarjeta con trescientas fotos para que os hagáis una idea del entorno y por donde andamos metidos Ya os contaré más, mas adelante, un abrazo.